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1: Etapa de Sensibilización

Tendrá una duración de un año y medio. Esta etapa pretende que todos, obispos, presbíteros , diáconos transitorios y permanentes, religiosos, religiosas, seminaristas y laicos nos demos cuenta y valoremos en primer lugar nuestro peregrinar como Diócesis a lo largo de la historia, pues también es Historia de la Salvación; en segundo lugar, que desde el proyecto divino sobre todos y cada uno de nosotros, contemplemos nuestro actuar como discípulos misioneros, de tal manera que, al concluir, podamos dar respuesta a los desafíos que nos ha marcado la Iglesia desde el Vaticano II hasta nuestros días.

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2: Etapa de diagnóstico

Tendrá una duración de un año, es la etapa del discernimiento, es ver quiénes somos desde nuestra propia historia y ver qué debemos hacer de acuerdo al proyecto de Dios y los desafíos marcados por la Iglesia, de esta manera lograremos identificar las urgencias y prioridades que exigen una respuesta evangélica en nuestra tarea misionera.

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3: Etapa de establecimiento de criterios de acción

Esta etapa se llevará a cabo en medio año: es una fase que implica la toma de decisiones ante los retos y desafíos que nos han planteado las etapas anteriores.
De esta manera podremos detectar las exigencias que nos plantea la vida nueva en Cristo, y así, en comunión y participación, podemos decidir juntos el caminar futuro de nuestra Iglesia de Durango. Las tres etapas, serán un trabajo de tres años, que se ubican en el marco de los 400 años de fundación de nuestra amada Arquidiócesis de Durango.

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