Preside Arzobispo Reunión Nacional de Catequesis

Reunión de Provincia de Catequesis-01La Arquidiócesis de Durango recibe como sede en su primera Reunión Semestral de Provinciales de Catequesis Nacional (DINNEC) a los 18 sacerdotes que representan a cada provincia, a fin de diseñar el plan trienal 2016 – 2019, en el que se resaltará el impacto de la visita del Papa Francisco a nuestra patria, así como para que se enriquezcan e impulsen los trabajos de los equipos de la DINNEC y se proponga la realización de la XII Jornada Catequística Nacional en el 2017. Esto lo informó el Presbítero Daniel Medina, Asesor de esta Dimensión, quien además comentó: “La Reunión se realizará del 1 al 3 de marzo del presente año, en el Convento “Los Santos Mártires de Durango (Madres Pasionistas)” a las 8:00 a.m., el Excelentísimo Señor Arzobispo Don José Antonio Fernández Hurtado es quien convoca esta Reunión.”

Vivamos plenamente la Semana Santa

vivamos la semana santa-01El Decanato Nuestra Señora de Guadalupe de la Arquidiócesis de Durango, está llevando a cabo Confesiones a fin de preparar a los feligreses para que vivan plenamente la Semana Santa, de igual manera todos los jóvenes están en plena preparación de pascua mediante distintos temas. Así lo dio a conocer el Presbítero José Guadalupe Chávez Alarcón, coordinador de este Decanato, quien además informó: “Las Confesiones se están realizando una vez por semana durante las tardes, en todas las Parroquias del Decanato, cabe mencionar que también se están organizando ejercicios cuaresmales para todos los feligreses”

CartaAnnua-Informe del P. Nicolás de Anaya al P. Superior en Roma (7)

3333550107_dd87082e26_q“El otro (escapado) fue el P. Andrés López, que en un partido de los Tapehuanes tenía su doctrina, en que se ve la especial Providencia con que el Señor dispuso la vida de uno y la muerte del otro: porque estando avisado el P. Andrés López para venir al Zape, al mismo tiempo que habiendo dispuesto su partida estaba ya a caballo para venir , en demanda de su venida, recibió carta de los Padres de El Zape, que dilatase el viaje, ora porque se transfería la fiesta, ora porque ya los Padres tenían algunos prenuncios y deslumbres, aunque hartas, de la inquietud de los indios, con que se detuvo, y tuvo tiempo para saber del alzamiento y ponerse en cobro (a salvo) como lo hizo, que, a no ser así, pasara la misma fortuna; retiróse a las minas de Indehé, donde quedaba pertrechado con treinta españoles, 20 de ellos arcabuceros, y estuvo allí, no del todo sin riesgo, porque andaban a la vista los escuadrones de los enemigos hasta que llegando a aquel Real el Gobernador, cuando después caminaba a Guanaceví, dejó en Indehé suficiente recaudo para su defensa”.

“El P. Hernando de Santarén, el mismo día que salió de su doctrina para bajar a este pueblo de El Zape, tuvo muy diferente suceso, porque muy pequeño rato después que se hubo partido de Guapijuje, llegó allí un propio con una carta del P. Andrés Tutiño, con que le daba aviso del rumor que entre sus Xíximes había corrido del alzamiento de los Tepehuanes que le tenía cuidadoso y no del todo seguro, por lo que después diré, y que así no saliese de su doctrina. No alcanzó este aviso al P. Hernando Santarén, y aunque se hizo diligencia para que lo tuviese, enviando hombres a caballo en pós de él, no pudieron alcanzarle y así hubo de caer en manos de los Tepehuanes, a quienes había también  doctrinado”.

“Llegó pues, el buen Padre, en la prosecución de su viaje, a un pueblo de Tepehuanes llamado Yoracapa y queriendo decir Misa, hizo llamar con la campana y a grandes voces al Fiscal, por recaudo para decirla, más entrando en la Iglesia, como la vio profanada, maltratado el Altar, arrastradas y desfiguradas las Imágenes, recelándose del mal que había, se volvió a poner a caballo para seguir su jornada. Aguardábanlo los indios, asechándolo al paso de un arroyo; aquí agarraron de él y le echaron de la mula abajo y él les preguntó ¿qué mal les había hecho, por qué lo mataban?  Respondieron ellos que ninguno; más que harto mal era para ellos ser Sacerdote , y con esto le dieron con un palo tan fiero golpe en el cerebro, que le esparcieron los sesos, dándole otras muchas heridas, con que el dicho Padre, invocando el dulcísimo Nombre de Jesús, acabó felizmente su jornada”.

                  “Se ha visto después acá, su cuerpo sin sepultura, a la orilla de un arroyo y desnudo, sin tener remedio de podérsela dar por ahora, como sí se dio por muchos días a los demás Padres y españoles que han muerto. Han llorado la muerte de dicho Padre Hernando de Santarén las mismas indias tepehuanes, mujeres de los matadores, cansadas de ver la crueldad de sus maridos contra sus Padres y Sacerdotes, que tan pacíficamente los doctrinaban”.

                  “Con el aviso que se dio en Guanaceví de las cosas de El Zape y con la falta del P. Alabés, salió al punto el Alcalde Mayor D. Juan de Alvear con doce soldados y llegaron a la media noche al puesto e Iglesia, a donde vieron el estrago que los idólatras habían hecho. Antes de llegar, encontraron a un hombre llamado Alonso Sánchez, ya difunto y cortadas las manos y abierto el vientre, y por el cementerio vieron muchos de los cuerpos desnudos y sembrados por todo el, muertos con la misma atrocidad, y otros dentro de la Iglesia. Vocearon por ver si se  había escapado alguno, y no respondiendo y volviéndose al Real con el sentimiento que fácilmente se deja entender, salió en pos de ellos una escuadra de enemigos con quienes pelearon valerosamente, y los fueron siguiendo por espacio de dos leguas, maltratándolos con muchas heridas, y al Alcalde Mayor le mataron el caballo y le dejaron a pie, con que corriera el mismo trance, si no lo socorriera un indio mexicano que se halló allí con su bestia y se apeó de ella e hizo subir al Alcalde D. Juan y esta lealtad que le salvó a él, puso al indio en términos de perder la vida, porque salió muy mal herido de la refriega, y aún le daban por muerto, hasta que al otro día apareció en el Real de Guanaceví. Venían los enemigos a caballo y a pie, vestidos de las ropas y bonetes de los Padres que dejaban muertos”.

  Héctor González Martínez

Obispo Emérito

 

Reunión Provincial sobre Catequesis

Reunión de Provincia de Catequesis-01La Dimensión de Nueva Evangelización y Catequesis de la Arquidiócesis de Durango (DINEC), llevará a cabo la primera Reunión Semestral de Provincia de Catequesis, a fin de diseñar el plan trienal 2016 – 2019, en el que se resaltará el impacto de la visita del Papa Francisco a nuestra patria, así como para que se enriquezcan e impulsen los trabajos de los equipos de la DINEC y se proponga la realización de la XII Jornada Catequística Nacional en el 2017. Esto lo informó el Presbítero Daniel Medina, Asesor de esta Dimensión, quien además comentó: “La Reunión se realizará el 29 de febrero del presente año, en el Convento “Los Santos Mártires de Durango” a las 6:00p.m.”

Seminario Mayor se prepara para Semana Santa

retiro de cuaresma seminario mayor-01El Seminario Mayor de la Arquidiócesis de Durango, llevó a cabo un Retiro de Cuaresma a fin de que los jóvenes seminaristas tomen conciencia sobre el tema de cuaresma y se preparen para la Semana Santa mediante exposiciones y temas de reflexión y meditación que impartió el Sacerdote José Luis Badillo. Así lo dio a conocer el Presbítero Rafael Landeros Rubio, rector de esta importante Institución, quien además comentó: “El Retiro se realizó en el Seminario Mayor por la tarde, fueron partícipes noventa y seis seminaristas y finalizó con una adoración nocturna”.

Escuela de la Cruz realiza Ejercicios Espirituales

Escuela de la cruz ejercicios-01La Escuela de la Cruz de la Arquidiócesis de Durango, llevó a cabo Ejercicios Espirituales para hombres, a fin de ayudar al ejercitante a discernir y a conocer lo que Dios quiere de él, así como para organizar la vida diaria de acuerdo a la voluntad divina, y sobre todo para anunciar el Kerygma y el Reino de Dios. Esto lo informó Eleuterio Pérez Soto, representante Diocesano, quien además comentó: “Los Ejercicios se realizaron en La Cueva del Padre Lencho, ubicada en la Sierra de Santiago Bayacora, Dgo., el Padre Guillermo Hernández Flores, fue quien impartió estos Ejercicios mediante distintos temas y exposiciones, y fueron partícipes alrededor de  treinta señores”.

Arquidiócesis renueva Consejo Presbiteral

Reunión de consejo-01El Excelentísimo Sr. Arzobispo, Don José Antonio Fernández Hurtado, convocó, a la primera Reunión del Consejo Presbiteral el lunes 22 de febrero del presente año, en el Arzobispado de la ciudad capital a las 10:00 a.m., en donde asistieron los Presbíteros que fueron nombrados por el oficio que desempeñan en la Curia. Así lo informó el Padre José de la Luz Guerrero Haro, quien además comentó: La finalidad de este Consejo es colaborar con el Obispo en el gobierno de la Diócesis para proveer al bien pastoral de la porción del pueblo de Dios que el Obispo tiene encomendado, y también le corresponde promover la responsabilidad y el entusiasmo de cada sacerdote para que sea fiel a su vocación y misión en la Iglesia Diocesana. El Consejo nunca puede proceder sin el Obispo, y a él mismo le compete cuidar que se haga público lo que se haya establecido. En El marco de esta primera reunión del Arzobispo con los sacerdotes q integran este consejo se designó al Coordinador de este Consejo, fue elegido el presbítero: Francisco Javier Pérez Bustamante.

Reunión de Pastoral Litúrgica

Reunión de Pastoral lit-01La Pastoral Litúrgica de la Arquidiócesis de Durango, llevará a cabo una Reunión de Formación, para los integrantes de los equipos promotores de liturgia y Ministros Extraordinarios de Comunión de las parroquias y capellanías, a fin de promover la formación litúrgica, así como para que haya un momento de convivio entre los participantes. Esto lo comunicó el Presbítero Lic. Juan José Martínez Mireles, Asesor de esta Pastoral, quien además comentó: “La Reunión se realizará el martes 23 de febrero del presente año, en el Centro Diocesano de Pastoral, ubicado en Calle Zarco #209 nte, a las 6:00p.m., y se trabajaran temas de formación doctrinal de manera teórica y práctica, con los grupos básicos e intermedios.”

Decanatos promueven Año de la Misericordia

decanatos promueven año de la misericordia-01El Decanato Santa Teresita del Niño Jesús de la Arquidiócesis de Durango, está llevando a cabo Confesiones a fin de preparar a los feligreses para que vivan plenamente la Semana Santa, en este año de la Misericordia. Así lo dio a conocer el Presbítero Rolando Flores Lizárraga, coordinador de este Decanato, quien además informó: “Las Confesiones se están realizando todos los martes y viernes de 5:00p.m. a 7:00p.m., en todas las Parroquias del Decanato.”

Carta-Informe del P. Nicolás de Anaya (6)

                  3333550107_dd87082e26_q“El Capitán de Olivas volvió a la Estancia de La Sauceda, donde llegó también el P. Fco de Arista, para trazar de ahí como de más cerca lo que más conviniese al reparo de aquella y de las demás Misiones. “Apenas hubo entrado el Capitán Olivas en La Sauceda cuando dio sobre ella un ejército de enemigos. Salió algunas veces y tubo algunas escaramuzas con ellos a vista de su puesto, unas veces a pie y otras a caballo, con advertencia de no alejarse en seguimiento de los enemigos, porque su ánimo era sacar a los españoles al monte, para poder desde ahí, más a su favor, destruirlos. El Capitán, hizo pues, su asiento en La Sauceda, por tener mejor aparejo de casa y de bastimentos necesarios, así para su gente como para el capitán Cordejuela, que con buen número de soldados llegó casi al mismo tiempo, y para la demás gente circunvecina, que de las haciendas y puestos comarcanos vinieron a guarecerse, donde vinieron los enemigos y cercaron La Sauceda, haciendo varios asaltos y acometimientos con que los tuvieron en aprieto, haciéndoles mucho daño y llevándose  cabalgaduras, que por no haber dentro bastimento para ellas, era fuerza sacarlas a pastar al campo”.

                  “Estuvieron los Capitanes Olivas y Cordejuela en La Sauceda cuarenta y dos días, defendiendo aquel puesto, y sería largo contar los casos que en esos días sucedieron: los enemigos acometieron cuatro veces  en diferentes días, siempre más reforzados de gente de a pie y a caballo; cada vez que venían intentaban entrar tres o cuatro veces, siempre en su daño que se les hacía con los arcabuces huyendo ellos y recibiendo poco daño los nuestros de su flechería, con que se retiraban. Se peleó con ellos otras tres veces en campo raso y otras dos fue el Capitán Olivas a buscarlos a sus rancherías y les dio albazos, matándoles en todas, cantidad de gente y saliendo victorioso; saqueó mucha parte de lo que habían hurtado, sacándoles los ganados y haciéndoles muchos otros daños, sin perjuicio alguno de los nuestros. Cogiéronse aquí a los principios dos indios, que pensando que esto era ya acabado, se entraron descuidadamente con sus arcos y flechas, y de ellos se supo el designio de los conjurados, de destruirlo todo hasta la Villa de Guadiana. Luego que se les tomó su confesión, fueron ahorcados”.

                  “En uno de los postreros asaltos, mató el Capitán Olivas muchos de los culpados en la matanza de Santiago; les quitó muchas armas, arcabuces, cueros y espadas, ropa, frontaleras, albas y otros ornamentos del culto divino, con que se pusieron en huida, aunque después tornaron a seguir a los nuestros; que tuvieron por mejor, habiéndoles quemado sus rancharías y casas, se retiraron con la presa a salvo y sin pérdida de soldado alguno y volverse a su puesto de La Sauceda, donde estaban ya recogidas más de cuatrocientas personas de nuestra gente, y visto que conservar aquel paraje no era de ningún efecto, pareció conveniente que los que ahí se habían congregado, se viniesen todos a la Villa de Guadiana, haciéndoles escolta los Capitanes Olivas y Cordejuela con sus soldados, como en efecto lo hicieron”.

                  “El mismo día que sucedió la muerte de los Padres Bernardo de Cisneros y Diego de Orozco en Santiago, hubo otro no menos lastimoso suceso en S. Ignacio de El Zape, con la muerte de los Padres Juan del Valle, Luis de Alavés, Juan Fonte y Gerónimo de Moranta, donde murieron también diecinueve españoles, que de Guanaceví habían venido a El Zape, a prevenir las fiestas que se había de hacer a honra de la Presentación de la Virgen Santísima, dedicándole un altar con una preciosa imagen. Mataron también más de sesenta negros y gente de servicio de los españoles, que estando quietos y sosegados, en la Iglesia de dicho pueblo  de S. Ignacio, dieron de improviso los indios sobre todos ellos y les quitaron cruelmente la vida; el viernes dieciocho de noviembre, al Padre Juan del Valle y al Padre Juan de Alavés con los demás, y el sábado siguiente (19 de noviembre), un cuarto de legua fuera del pueblo, a los Padres Juan Fonte y Gerónimo de Moranta que venían de sus partidos a congregarse, como solían, y celebrar la fiesta en El Zape. Solo escapó un muchacho que pudo dar aviso a los de Guanaceví, de que los indios de El Zape andaban bregando con los españoles, que estaban con los Padres. Este avisó, y certificárnosle del hecho en que, aquella noche no había ido, como solía, el P. Luis de Alavés para decirles Misa al día siguiente”.

Héctor González Martínez

Obispo Emérito