Nuevos Proyectos en la Escuela de la Cruz

Escuela de la cruz nuevos proyectos-01 (1)La Escuela de la Cruz de la Arquidiócesis de Durango, llevó a cabo una Reunión con los equipos diocesanos de la Escuela, a fin de hacer un balance de todo el trabajo que se ha realizado en el transcurso del año, así como para proponer nuevas metas y proyectos para el año entrante, mediante las dinámicas propias de la Escuela. Así lo dio a conocer Eleuterio Pérez Soto, representante Diocesano, quien además comentó: “Este tipo de reuniones se realizan cada seis meses, y en esta ocasión se llevó a cabo el 10 de octubre del presente año, a las 10:00 a.m., en la Casa de Ejercicios “Pablo VI” en el poblado de la Joya, Durango, además aprovechamos para repartir el nuevo calendario del 2016”.

P. Hernando Santarén (3)

          3333550107_dd87082e26_qDe la Villa de S. Miguel de Culiacán, salieron los Padres el 12 de julio y al día siguiente entre Tecorito y Capirato llegaron a unas minas e ingenio de sacar plata, propiedad del capitán Gaspar Osorio, devoto de la Compañía a quién los Padres le echaron de ver semblante triste y preguntándole la causa, lloroso les entregó una carta de Sinaloa, refiriendo el martirio del P. Gonzalo de Tapia por motivo del ministerio, pues reprehendiendo los vicios y la libertad de costumbres, habiéndose rebelado los indígenas y apostatado los cristianos, pusieron las manos sobre su persona y sobre las imágenes, quemaron los templos y huyeron al monte: consumó felizmente el varón de Dios, su peregrinación y ministerio, laureado en su propia sangre del martirio.

          Guardando unos días en oración, penitencia, lágrimas y Eucaristía, los Padres recibieron aviso que no eran tantos los peligros en los caminos, exceptuando los ríos crecidos, prosiguieron su viaje sin escolta y llegaron a los pueblos de Sebastián de Ébora (hoy congregados en el Mocorito), donde los fieles salieron a recibir a los Padres con cruz alta y procesión, cantando la doctrina cristiana y otras muestras de regocijo. Llegaron a la Villa de S. Felipe y Santiago de Sinaloa, regocijándose con la salud de unos y otros y yendo luego a visitar el sepulcro del mártir P. Tapia, encomendándose a su intercesión.

          La amorosa y paternal Providencia, de los males saca bienes y aún los permite para remediar con milagrosas ventajas. Pues permitió que los indígenas martirizaran en Sinaloa al P. Tapia, que era columna de la fe y lumbrera de aquella Iglesia; pero al mismo tiempo quiso Dios sustituirlo con el P. Hernando, para que corrieran iguales en las virtudes, en el celo por las almas y la milagrosa actividad por el deseo que en medio de la idolatría amaneciera la luz del Evangelio a los ciegos y olvidados gentiles. Porque si primero el P. Tapia comenzó la cementera del Evangelio en Sinaloa, ahí siguió el P. Hernando, abrazando en el fuego de la caridad; y de lo que el P. Tapia sembró, después el P. Hernando recogió mayores y más sazonados frutos, e introdujo el Evangelio con creces y ventajas en otras nuevas naciones de la sierra.

           Empujado por el celo de las almas, sin atender a temores y dificultades, pronto salió el P. Santarén, acompañado por el P. Juan Bautista de Velasco, misionero muy experimentado en el ministerio de la conversión, a misionar y evangelizar en los pueblos de Sebastián de Ébora, Bacoburito y otras rancherías, que siendo los más tranquilos, también se habían retirado a los montes y algunos andaban alborotados.

          Comenzó por una vida austera  y penitente, además de sus prácticas ordinarias, continuos ayunos, fervorosas oraciones, con un corazón desapegado, aplicándose ente todo en aprender la lengua del lugar; porque era tan grande la variedad de lenguas en esta tierra, que parecía a los misioneros, que ello fue treta del demonio, príncipe de la confusión, para dificultar el remedio de muchas gentes. Pero, el P. Hernando no se frenó en esta trampa, pues en las partes donde se requería aprender nuevas lenguas, aunque le faltara intérprete, con constancia y fortaleza,  con su buen discurso y esfuerzo, y con la ayuda de Dios, pronto predicaba docta y propiamente como si le fueran naturales. Trabajó mucho por atraer a los bautizados que por el alboroto pasado, andaban huyendo por los montes como fieras, temerosos del castigo. Y los que estaban más quietos, eran tan bárbaros, que los indígenas de Tovorapa, Saboria y otros, convertidos por el P. Tapia, querían vengar la muerte del Padre, matando también a los demás. No reparando en ese riesgo, el P. Santarén, recorría los montes, buscando a los fugitivos con toda clase de trabajos y sacrificios: hambre, cansancio, rigor del sol, evidentes riesgos de la vida, por quitarles el temor y reducirlos a sus poblaciones para cristianizarlos. Dios premió sus sacrificios, pues, serenó los ánimos inquietos y bautizó a muchos, de modo que volvió a florecer aquella Cristiandad.

Héctor González Martínez; Obispo Emérito

 

Concluye Encuentro de la Provincia Durango

Encuentro presbiteral de provincia-01Se celebró con éxito el VII Encuentro Presbiteral de Provincia 2015, cumpliendo el objetivo de fortalecer en la Comunión Presbiteral la amistad y la  colaboración en los proyectos de la Pastoral a nivel provincia. Así lo informó el Presbítero José de la Luz Guerrero Haro, Secretario Canciller, quien además subrayó: “El Encuentro finalizó con la comida y convivencia, agendando para el próximo año este Encuentro en la ciudad de Torreón, Coahuila. En esta ocasión hubo una participación de aproximadamente ciento cincuenta presbíteros de toda la provincia, consumada por las Diócesis de Gómez Palacio, Torreón, Mazatlán, El Salto y Durango. Estamos muy agradecidos con el Obispo del Salto y su Presbiterio, por la calidez y hospitalidad que ofrecieron en dicho evento”.

Cursillo para Mujeres

Cursillo para mujeres_-01El Movimiento de Cursillos de Cristiandad de la Arquidiócesis de Durango, está realizando un Cursillo para mujeres, a fin de potenciar la vida espiritual de las participantes, a través de diferentes dinámicas como la meditación y temas estructurados para afrontar con alegría y responsabilidad los retos que se les presentan, así como para suscitar un encuentro personal con Jesucristo vivo. Esto lo expresó el Presbítero Lic. Manuel Bernardo Aguirre Márquez, Coordinador de este Movimiento, quien además informó: “El Cursillo es del 8 al 11 de octubre del presente año en la Casa de la Cristiandad de la ciudad Capital, el cual será impartido por diferentes sacerdotes y laicos”.

En la Arquidiócesis se reza el Rosario

Rezo del Sto Rosario-01Con motivo de que octubre es el mes de Rosario, el Decanato San Miguel de Papasquiaro de la Arquidiócesis de Durango, llevará a cabo el rezo diario del Santo Rosario, a fin de reconocer a María como la Madre del Señor Jesús, así como para hacer de María y José la cabeza de los Misioneros de este tiempo. Esto lo informó el Presbítero Oscar Chávez Mata, coordinador de este Decanato, quien además subrayo: “El Rosario se realizará todos los días durante este mes, en los barrios y calles de cada cabecera parroquial del Decanato, de 6:00p.m. a 7:30p.m., Oremos para que Dios a través de María intervenga a favor nuestro”.

VII Encuentro de la Provincia Durango

Encuentro presbiteral de provincia-01El Presbiterio de la Arquidiócesis de Durango, será partícipe en el VII Encuentro Presbiteral de Provincias 2015, el cual tiene como objetivo convivir y fomentar la fraternidad sacerdotal. La agenda del Encuentro contempla diferentes actividades recreativas y temas de reflexión de interés para los participantes, así como la Celebración Eucarística. Así lo dio a conocer el Presbítero Delfino Hernández Andrade, coordinador de este evento, quien además informó: “El Encuentro se realizará del 6 al 8 de octubre del presente año, en el Auditorio de la Catedral “Santa María de Guadalupe”, en el Salto, Pueblo Nuevo, Dgo. Cabe mencionar que este Encuentro se lleva a cabo cada año. En esta ocasión, se espera contar con la presencia de más de  cien presbíteros de la cinco Diócesis que conforman la  “Provincia de Durango”: Gómez Palacio, Torreón, Mazatlán, El Salto y Durango”

P.Hernando de Santarén 2

3333550107_dd87082e26_qLlegando a Ciudad de México, el Hno. Hernando pasó al Colegio S. Pedro y S. Pablo de la  Compañía de Jesús, para realizar  sus estudios de Teología con mucho fervor. Los tiempos libres, se pasaba al adjunto Colegio de S. Gregorio Magno, a enseñar doctrina cristiana y compartir su experiencia religiosa, con los hijos de los Caciques naturales, ahí hospedados; y al mismo tiempo aprender náhuatl, que después habría de ejercitar. Ahí hizo cuatro años de Teología, de lo que salió aventajado teólogo, siempre con la mira en la virtud, sabiendo que las letras sin virtud son como naves sin velas para navegar. Se ordenó de Sacerdote y tuvo su tercera probación en el Colegio del Espíritu Santo de Puebla. Muchos deseaban que permaneciera en aquel Colegio.

          Pero, nuestro Señor le tenía escogido para luz y apóstol de la gentilidad, los Superiores le enviaron a la selva de la gentilidad de Sinaloa, donde ya había misionado el P. Gonzalo de Tapia (pronto martirizado) y  el P. Pedro Méndez habían fundado una Misión tres años antes; allá colaboraban también los Padres Martín Pérez, Juan Bautista de Velasco, Alfonso de Santiago y el Hno. Francisco de Velasco. Tan avenidos y en comunión estaban, que para 1594 ya tenían bautizados y educados en la fe seis mil cien cristianos adultos, repartidos en veinticinco capillas. Era tan copiosa la mies, que era imposible atender a tantos; por lo que el P. Tapia había pedido al Provincial socorro con nuevos obreros del Evangelio; cuando supo que había llegado a Culiacán el refuerzo, dijo: “ahora sí, que con tan buenos compañeros, hemos de dar un grande empellón al demonio; esta vez le hemos de retirar y desterrar bien lejos”; pero a él no le tocó verlo.

          Acompañando al P. Méndez, allá enviaron al P. Hernando, muy parecidos en el fervor y en el celo. Parten pues, los dos en mayo de 1594, hacia el poniente. El P. Hernando sufrió con fervor los muchos trabajos, fatigas y necesidades de un camino tan largo, despoblado, y desprovisto de lo necesario para la vida humana. Todo lo sufría el P. Hernando con paciencia y alegría, aceptado más por amor a Cristo.

          En todo el camino, los Padres experimentaron la paternal Providencia de Dios, librándolos de manifiestos peligros de la vida, defendiéndolos de traiciones, reveses, crueldades y varios asaltos  de los chichimecas, debiendo a veces dejar los caminos ordinarios y atravesar sierras y montes asperísimos, ni senda por muchas millas. La Providencia de Dios permitió, que una vez el P. Hernando de repente se vio cercado por un grande incendio, que no daba esperanzas de su vida, pero, queriéndolo el Señor para grandes fines de su mayor gloria, le libro del incendio.

          El 27 de junio de 1594, llegaron a la Villa de S. Miguel, cabecera de la Provincia de S. Miguel de Culiacán, habiendo caminado trescientas leguas. Rápidamente corrió la noticia y fue grande la reacción, saliendo las gentes a los caminos, calles y plazas a recibirlos. Esta devoción y benevolencia creció después de ver y conversar con religiosos tan santos y humildes, tan despegados de sí y de las cosas, tan suaves y humanos en su trato, tan celosos del bien de sus almas; pidieron con insistencia que se detuvieran algunos días con ellos para predicarles; así lo aceptaron los Padres, predicando el P. Méndez a los nahuas y el P. Santarén a los españoles.

          Continuando las labores de los Padres Tapia y Méndez, en las cinco predicaciones que hizo el P. Santarén en esa ocasión, con su santidad y dulzura de estilo, aquella provincia se apegó de tal manera al Padre, que todo el tiempo que vivió le profesó devoción y aún después conservó su recuerdo celebrando su celo y los santos efectos que provocó, dejando edificada y admirada aquella tierra, rogando su bendición y encomendándose a sus oraciones.

          Es que el P. Santarén, no parecía un operario solo, sino un conjunto  unido y compacto, por su actividad, celo y virtudes para conquistar con las armas espirituales de la predicación naciones, pueblos y provincias, cuantas aún no habían conquistado sus hermanos, desterrando al diablo.

Héctor González Martínez

Obispo Emérito

 

Adoradores Nocturnos Renuevan sus Votos

adoradores renovados-01El Movimiento Adoración Nocturna Mexicana de la Arquidiócesis de Durango, llevó a cabo una Celebración Eucarística a fin de que realizaran una renovación de pertenencia de todos los adoradores nocturnos, para tener una entrega sin limitaciones a la conducta del Espíritu Santo y una constante docilidad para seguir sus inspiraciones. Esto lo informó el Presbítero José Luis Gudiño Manzo, coordinador de este movimiento, quien además comentó: Esta Celebración se realizó en el Templo Expiatorio del Sagrado Corazón. Fue un acontecimiento a nivel Arquidiocesano, participaron alrededor de seiscientas personas, donde además de renovar sus votos, encontraron el perdón de los pecados cometidos.”

Animación Misionera en Chinacates Durango

La Pasion de los jovenes-01Las Obras Misionales Pontificio Episcopales de la Arquidiócesis de Durango, llevará a cabo una Peregrinación Juvenil de Animación Misionera, con la finalidad de animar la conciencia misionera de los jóvenes, mediante diferentes actividades, para dar testimonio de fe, así como ofrecer oración y ayuda a favor de las misiones. Así lo dio a conocer Norma Rodríguez, coordinadora diocesana de este movimiento, quien además informó: “La Peregrinación se realizará los días 3 y 4 de octubre del presente año, partiendo de la ciudad de Durango a el poblado de Chinacates, y de ahí a Santiago Papasquiaro, quienes participan son los jóvenes de la Liga Misional Juvenil de la región de Santiago Papasquiaro y la Pastoral Juvenil Diocesana. Las actividades son: La Eucaristía de apertura en Chinacates, animación y porras misioneras durante la marcha, el Santo Rosario y Catequesis.”

La Arquidiócesis fomenta la Formación de las Conciencias

Dec Zac Formador en la fe-01La Arquidiócesis de Durango comprende algunos municipios del norte del estado de Zacatecas, mismos que conforman una pequeña región que se agrupa para fines del trabajo pastoral, como un Decanato. Ahí se están formando y preparando las conciencias en los niños y en los padres, mediante una metodología especial a su edad, para aumentar los conocimientos esenciales y fundamentales de la fe de la Iglesia. Así lo dio a conocer el Presbítero Edgar Magallanes, coordinador de este Decanato, quien además comentó: Esta enseñanza se está llevando a cabo en todas las Parroquias del Decanato una vez a la semana, con niños de primero a sexto de primaria, y jóvenes de secundaria, y también se realiza un retiro al mes para los papás y los padrinos”.