TALLERES DE ORACION Y VIDA UNA RESPUESTA AL MUNDO DE HOY

Durango, Dgo. 13 de julio de 2009. Los Talleres de Oración y Vida (TOV), es un movimiento católico internacional. En nuestra Arquidiócesis está adherido al Consejo Diocesano del Apostolado Laical (CODAL). Su fundador es el Padre Ignacio Larrañaga, sacerdote franciscano, capuchino, originario de España, quien ha desarrollado una amplia labor animadora y evangelizadora durante 30 años en América Latina, Norteamérica y Europa.

Estos talleres se basan en la Biblia, poniendo a Cristo como el epicentro, su servicio es exclusivamente laical con un carácter práctico y experimental, sus talleres son liberadores y sanadores a través del conocimiento de Dios y de uno mismo, y promocionan los valores del evangelio. Es una presentación más vibrante y activa de Jesús que posee una mayor adaptación a las necesidades de la sociedad actual a lo que realmente las personas necesitan.

El movimiento es reconocido y aprobado por la Santa Sede en 1997. Quienes los imparten son llamados guías, el eje de cada sesión es la lectura y meditación de la palabra. Para todos los días de la semana, durante cuatro meses, se les enseña a los participantes, textos del Antiguo y Nuevo Testamento para meditarlos y rezarlos en sus casos, con una pedagogía especial. Se aprende a entrar en la relación personal con el Señor, con variadas modalidades, desde los primeros pasos hasta las alturas de la contemplación. Como el orar, en cuanto a actividad humana, es también arte, por eso la organización del taller contiene y ofrece una pedagogía progresiva, un carácter metódico y mucha disciplina, obteniendo como resultado: AMIGOS Y DISCÍPULOS DEL SEÑOR.

Es un taller de vida porque a partir de una intensa contemplación de la figura de Jesucristo, el taller lanza al cristiano a un proceso para ser cada vez más parecido a Jesús: paciente y humilde, sensible y misericordioso, despreocupado de sí y preocupado de los demás… preguntándose a cada paso ¿qué haría Jesús en mi lugar?, produciendo una transformación vital que a muchos les hace exclamar: ¡cómo ha cambiado nuestra madre, nuestro hermano…! Es, pues, también, taller de vida.

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *