EL ADVIENTO

Durango, Dgo., 26 de noviembre de 2011. El domingo 27 de noviembre, comienza el Adviento y el nuevo año litúrgico. Es un tiempo especial de gracia que nos prepara a celebrar la llegada de Cristo entre los hombres, la Navidad. La palabra Adviento, significa «llegada» y claramente indica el espíritu de vigilia y preparación que los cristianos debemos vivir. Al igual que se prepara la casa para recibir a un invitado muy especial y celebrar su estancia con nosotros, durante los cuatro domingos que anteceden a la fiesta de Navidad, los cristianos preparamos el interior de nuestras personas, para recibir a Cristo y celebrar con Él su presencia entre nosotros.

En este tiempo es muy característico pensar: ¿cómo vamos a celebrar la Noche Buena y el día de Navidad? ¿Con quién vamos a disfrutar estas fiestas? ¿Qué vamos a regalar?. Pero todo este ajetreo no tiene sentido, si no consideramos que Cristo es el festejado a quien tenemos que acompañar y festejar se llegada cada día a nuestro corazón. Cristo quiere que le demos lo más preciado que tenemos: nuestra propia vida; por lo que el período de Adviento nos sirve para preparar ese regalo.

El color litúrgico para este tiempo es el morado, que significa y nos recuerda la virtud de la Esperanza y la  actitud de penitencia y sacrificio que debemos tener para prepararnos a tan importante evento. Encendamos pues esta grandiosa luz de la Esperanza que nos motiva para vivir el encuentro personal con el Dios de la vida.