Las Ideologías Modernas
En adelante, nos referiremos a las principales ideologías políticas del liberalismo, del nacionalismo, del marxismo y del cientismo.
Para ello, hay que contar con algunas definiciones o descripciones sobre ideología, empezando por ideología como un sistema de ideas simplificado para el uso de la masa, con fines de conquista y ejercicio del poder. Se caracteriza por elementos preconstituidos, por un esquematismo vago y abstracto, por una intensa carga afectiva y emotiva ligada a conceptos abstractos, por una visión reduccionista de la naturaleza humana y por un elemento utópico como elemento escatológico secularizado.
Otras definiciones de ideología ayudan a comprender: es el producto de una relación de dominio social y elemento estructural permanente de la historia de las sociedades humanas; es un sistema de creencias recibido por los miembros de una colectividad, orientada a la integración de la misma colectividad; es un sistema abarcador de toda la realidad, cuerpo de creencias animado por la pasión que tiende a la transformación de los modos de vida.
Entran aquí en juego las ideologías, porque la revolución cultural que hemos repasado hasta aquí, empujó al antropocentrismo radical a buscar una justificación absoluta. Si Dios no ejercía más el rol de centro y fundamento de la humanidad y del mundo, el hombre debía buscar otro centro y otra fundamentación.
En los siglos XIX y XX, siglos absolutizadores, se tiende a una transferencia de valores absolutos hacia realidades relativas y contingentes: cuando falta Dios, el hombre trata de ocupar el hueco dejado por la trascendencia o se cae en el nihilismo y la falta de sentido. La historia de las ideologías políticas contemporáneas es la historia de la absolutización de lo relativo.
Se producirán falsos absolutos que tratarán en vano de ocupar el lugar del Absoluto: en el liberalismo, la libertad no es entendida como libertad creatural, sino como causa de sí; en el marxismo, la clase proletaria, la nación en el nacionalismo, la raza en el nacionalsocialismo o el Estado en el fascismo son otros tantos falsos absolutos.
Napoleón entendió peyorativamente la ideología como “primera filosofía”, entendiendo con ello una construcción artificial abstracta alejada del sentido común de la gente normal. Marx difundió ampliamente el concepto de “ideología” en un doble sentido: como una representación falsa de la realidad, identificable con la alienación filosófica y religiosa en beneficio de la clase dominante para perpetuar el dominio de los ricos sobre la clase desposeída; y como instauración de la clase comunista sin clases, ideología llamada a permanecer como estructura del espíritu humano.
La ideología se relaciona con la religión, como conjunto totalizante de ideas o creencias; pero se distinguen por su origen. De la heteronomía en que el mundo recibe su origen y su sentido de Dios, se pasa a la autonomía absoluta en que el mundo se autofunda sin referencia a la trascendencia.
De donde se pueden definir las ideologías como “religiones de lo temporal” o “religiones secularizadas”. Para el cristiano la historia de descifra a la luz de la fe; las religiones ideologizadas, negando la revelación divina, afirman la luz de la razón como suficientes para interpretar la historia y la civilización.
Durango, Dgo. 8 de junio del 2008.
Héctor González Martínez
Arz. de Durango